en genérico
marzo 2012
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en genérico
T
odas las novelas tienen cierto origen
autobiográfico. La memoria personal
es la mejor fuente de donde el autor
puede extraer sensaciones, experiencias,
sentimientos, reacciones ante triunfos
y fracasos, lágrimas de exaltación y
suspiros de frustración. Y ésta,
La Segunda
Oportunidad
, es evidentemente una
novela de fuerte sentido testimonial.
No importan tanto en este sentido los
hechos narrados como los pensamientos,
los sentimientos, las percepciones. Lo que
se intenta transmitir es una experiencia
de relación con la vida empresarial y la
búsqueda de una gestión distinta, con
otra sensibilidad, con otros instrumentos,
con otra perspectiva vital en la que el
teatro acaba siendo la columna vertebral.
Y en ese sentido, el autor expresa con
toda nitidez lo que intenta decir, ligando
su formación, su ciudad de origen, sus
primera ideas, sus primeras intuiciones
acerca del mundo a su trayectoria futura y
sus cambios de perspectiva profesionales.
La segunda oportunidad
es, esencialmente
eso, la narración de una trayectoria que,
como tantas, acaba evidenciando que
necesita una segunda oportunidad.
Y cómo, la vida, si se interpreta
eficientemente y con optimismo y se
afronta con todas las herramientas
que uno ha ido encontrando, siempre
ofrece una segunda oportunidad y una
reconversión personal y profesional.
o
cio
Julio trujillo
Periodista y crítico literario
en varias publicaciones
nacionales e internacionales
Reconversiones individuales
EL LIBRO
La Segunda Oportunidad
de Martín Hernández-Palacios
Editorial Aliter
Año: 2010
286 páginas
N
uestra recomendación de este
número tiene truco: mencionamos
un restaurante excelso, avalado
por dos estrellas
Michelin,
cuando en
realidad queremos destacar el hotel que
lo acoge, una novedad más que grata
en el panorama español de los cinco
estrellas. Ambos (casa de huéspedes y
comedor) comparten nombre,
atrio,
y
ubicación, un edificio ideado por el estudio
tuñón y Mansilla
en el casco antiguo de
Cáceres,
que es centro de peregrinación
de arquitectos por su alabada factura
perfectamente integrada en su entorno.
Allí se mudó hace algo más de un año el
restaurante que han hecho grande
toño
Pérez,
su laureado chef, y
José antonio
Polo
(sala y bodega) durante lustros. Ellos
dicen que se encuentran más cómodos
entre estos muros de piedra, y eso el
cliente lo percibe. Bendecido por el sello
de calidad
Relais & Châteaux,
Atrio existe
porque hay gente a la que le gusta disfru-
tar y además puede permitírselo.
En el hotel de 14 habitaciones y en el res-
taurante, ubicado en la planta baja, todo
son detalles de buen gusto. Ordenadores
Apple de última generación, sales de baño,
bañeras exentas, espacio y minimalismo.
En la mesa, vajilla
Raynaud de limoges
en impecable mantel blanco y manja-
res como la cigala careta de ibérico y el
cabrito, dos clásicos de la casa de obligado
cumplimiento.
Cuando es temporada de pluma ibérica, a
principios de año, Toño la cocina
a la parrilla
con puré de berros,
y se deshace en la boca,
como la
merluza con infusión de patatas,
puerros y pimientos
. La calidad de lamateria
prima, de raíces extremeñas, es indudable.
Con el vino, o lo tiene muy claro o se liará
con tanta referencia (suman 3.600). Más
que una carta el sumiller reparte un libro
con comentarios. Déjese guiar por él, pues
por algo está al frente de una de las me-
jores bodegas de restaurante del mundo,
con 40.000 vinos y botellas decoradas por
Picasso, Miró, Bacon
... Por supuesto, no
olvide pedir que se las enseñen.
Si se aloja en el hotel tampoco dude en pe-
dir que le lleven el desayuno a la habitación.
Cuesta 30 euros y es uno de los mejores
que hemos probado en un hotel en todo el
mundo. El precio oscila entre 250 y 700 eu-
ros la noche. Comer en el restaurante, entre
89 y 109 euros sin iva. Las tres cosas (cena,
hospedaje y desayuno) merecen la pena.
Más que un dos estrellas
EL RESTAURANTE
Atrio
Plaza de San Mateo, 1
Cáceres
Teléfono: 927 242 928
www.restauranteatrio.com
ana Franco
Periodista y experta en lujo,
autora de reportajes de estilo
de vida en varios medios
en Twitter: @AnaFrancoLuxe