REVISTA EN GÉNERICO NÚMERO 30

temente precisos en lo que se refiere a llegar al decisor adecuado, en el momento oportuno y por el canal más eficaz, ase- gurando la coherencia y la relevancia del mensaje, que ha de basarse siempre en la demostración del valor/inversión y nunca solo en una conversación de precio/gasto. Así pues, los desafíos actuales requie- ren nuevos modelos más rápidos, más eficientes, basados en la utilización de la información de uso en vida real para demostrar el valor, facilitar el diagnóstico, adaptar el modelo de dispensación y di- señar una estrategia de comercialización más precisa. La oportunidad pasa por abordar tres áreas claras: acortar el desarrollo clínico (menos costes/más ventas), acelerar/ ampliar el diagnóstico (invirtiendo en dotar de medios y patrones de decisión al clínico), mejorar la eficacia de cada inte- racción (llegar a cada decisor/prescriptor en el momento oportuno, con el mensaje relevante, por el canal más conveniente y siempre asegurando la consistencia a nivel general). Todo ello solo será posible automatizando los procesos tanto internos como externos y utilizando las herramientas que los avances tecnológi- cos ponen en nuestras manos. Mercado farmacéutico español En España la situación es análoga. Actualmente los fármacos hospitalarios son los que dirigen el crecimiento del mercado. Oncología, AIB y VIH con- centran el 50 por ciento de la inversión en consumo a través del canal. En la farmacia hospitalaria, la innovación de los últimos cinco años supone ya el 35 por ciento del consumo. El peso de medicamentos genéricos y biosimilares ha aumentado en los últimos años de manera relevante en áreas como AIB, donde el 41 por ciento del consumo corresponde a fármacos que han perdido la patente, y otro 19 por ciento a opciones que la perderán en los próximos dos años. En el segmento de farmacia comunitaria, el volumen de unidades dispensadas es quien conduce el crecimiento del mercado de prescripción; la disminución del precio medio compensa la aportación positiva de la innovación y parte del crecimiento del volumen. Desde 2015, la penetración de medica- mentos genéricos en el mercado se ha estabilizado en el 40 por ciento de cuota en unidades. De aquí en adelante se reduce la ventana de oportunidad que le dan las pér- didas de patente, dado que solo un 25 por ciento del mercado corresponde a fárma- cos donde la patente aún no ha expirado. En los próximos cinco años, el área de Oncología seguirá liderando la contribu- ción al crecimiento en el mercado español. Sin embargo, al igual que sucede en el resto de los países desarrollados, nuestra previsión es que el mercado farmacéutico español reduzca su crecimiento en los próximos cinco años, para situarse en torno a un 3 por ciento. Esta ralentización es transversal a todas las clases terapéuticas, con tasas de cre- cimiento negativas en algunos mercados. Un análisis detallado del pipeline nos da una idea de la dificultad que las innovacio- nes terapéuticas recientes y las promesas a la vista suponen para el fabricante y el resto de los agentes sanitarios, tanto en el desarrollo clínico como en la fase de comercialización. Se vislumbra un futuro esperanzador, pero lo cierto es que asegurar el acceso a toda la innovación no será inmediato; supone un reto en cuanto a evaluación, financia- ción y dispensación y pone a prueba la infraestructura y el valor de la informa- ción disponible. Nuevos modelos Por una parte, son necesarios nuevos modelos que reconozcan el valor real de la innovación y gestionen la incertidumbre a largo plazo, adaptando el modelo de financiación y reembolso para considerar los beneficios que las nuevas alternativas ofrecen más allá del impacto presupuesta- rio anula/parcial. Mas allá del acceso, la información de la práctica real ofrece la oportunidad de reducir las incertidumbres que puedan existir en el lanzamiento, y de esta manera reconocer y recompensar la inversión a largo plazo que la investigación clíni- ca requiere. Dados los beneficios que la innovación aporta, es necesario adaptar los modelos de financiación al largo plazo en el que los mismos se realizan, trascendiendo los presupuestos anuales o parciales y sin ol- vidar la necesidad de apoyar el desarrollo de tratamientos que cubren necesidades sociales, como el tema de las resistencias a los antibióticos. Además, será necesario asegurar que la innovación se incorpora de manera eficaz a lo largo del ciclo de vida del paciente y que, para ello, se utiliza la información de la práctica clínica real y las técnicas de análisis adecuadas para apoyar el acceso a los nuevos fármacos y mejorar la dispensa- ción. La regulación vigente y la infraestruc- tura debe apoyar el uso creciente de datos de salud. Las técnicas más sofisticadas de tratamiento de información serán vitales para mejorar las pautas de tratamiento, lle- gar a acuerdos de financiación innovadores y optimizar los resultados en salud. La colaboración desde etapas muy tempranas en el desarrollo de la innova- ción asegura la participación de todas las partes interesadas en cada éxito y ayuda a garantizar que el potencial de innovación se realice plenamente. Los desafíos actuales tienen que ver con la búsqueda de ese punto de equilibrio que maximice los beneficios y los resultados tanto para el fabricante como para el proveedor sanitario www.aeseg.es 23 NÚMERO 30 | NOVIEMBRE 2019 . nforme sectorial i

RkJQdWJsaXNoZXIy MzA4NDQ=